martes, 19 de octubre de 2010

Círculo vicioso


La información se ha vuelto arma de guerra.

Con ella los pueblos

desesperan,

esperan,

compran,

venden,

sienten,

no sienten,

dicen,

callan,

gritan,

susurran.

Y nada es propio de la abstracción que encierra la palabra informativa. Sólo se trata de un denominador más grande, más importante. Un actor paradojicamente amado a  pesar de su caída en picada desde lo más alto de la ignorancia. Ese actor se llama empresario, y es  alimentado por el dinero que nosotros mismos ganamos. Ese mal forma parte del sistema inquebrantable, deborador de mentes: capitalismo. Sistema deborador de arte, palabras, sentimientos. Destructor de bondades, dominador de masas. 


V

No hay comentarios:

Publicar un comentario